Biografías: Francisco Díe Losada.

Francisco Díe Losada. Colección Antonio Luis Galiano Pérez.

Don «Paco Díe».

Nacido en Orihuela el 11 de abril de 1877. Hijo de Francisco Díe Pescetto, teniente coronel de Infantería, natural de Orihuela; y de Paula Losada Bofarull, nacida en Reus.

Bautizado en la Catedral con los nombres: Francisco de Asís, Esteban, Juan y León.

Esquela de su padre. 27 de noviembre de 1907.

Personaje clave en la política oriolana de los años 20 del siglo pasado como cabeza visible de un grupo de acaudalados ciudadanos que nombrados por la Dictadura de Primo de Rivera transformaron el aspecto de la ciudad tras años de dejadez municipal.

Muy lejos todavía de su etapa política, en diciembre de 1901, Francisco se casó con Enriqueta Pescetto y Román en la iglesia de Santiago. Era, por esas fechas, teniente de Artillería. Continuó su carrera militar, que abandonó con el grado de comandante.

Juez de Aguas y Caballero Cubierto, el 31 de marzo de 1925 fue nombrado concejal accediendo a la Alcaldía de Orihuela el 6 de mayo de 1926.

Por encima de opciones políticas fue un alcalde eficaz. Acometió con entusiasmo obras tan necesarias como la construcción de la lonja de contratación, un nuevo puente sobre el Segura y un cuartel para depósito de sementales.

Junio de 1928. Acto oficial de entrega al Estado del Cuartel de Sementales. Colección Javier Sánchez Portas.

En este breve periodo se urbanizó Capuchinos y la calle Unión Agrícola; se hermoseó la Glorieta dotándola además de su ya tradicional templete; también las Plazas Nueva y de Monserrate con los románticos jardines que aún conservan. Su legado fue el proyecto de construcción de las Escuelas Graduadas.

El 4 de febrero de 1930, tras la renuncia del General Primo de Rivera, presentó su dimisión irrevocable como alcalde y concejal; y se acordó dar su nombre a una calle de nueva creación próxima a la Glorieta.

El alcalde entrante, Antonio Balaguer, decidió modificar el acuerdo municipal y hacerlo con la de Santiago, pero la II República dejó todo en suspenso.

Propietario de extensas fincas fue Juez de Aguas; colaboró con Luis Almarcha en la creación de la Federación de Sindicatos Agrícola-Católicos, de los que fue presidente. Hombre de misa diaria, también presidió la cofradía de la Virgen de Monserrate.

Francisco Díe, a la derecha de Alfonso XIII.

Al estallar la guerra y con la esperanza de evitar el saqueo, trasladó la imagen con su corona de oro y piedras preciosas a la iglesia de Santiago, encargando además a su sobrina Ascensión Germán Pescetto que escondiera las valiosas joyas de la patrona.

Detenido y confinado en el colegio de Jesús María, acabó sus días en manos de un desaprensivo tristemente famoso por sus violentos desmanes en la segunda mitad de 1936.

Colección Javier Sánchez Portas.

La madrugada del 25 de agosto, unos pistoleros le llevaron junto al jefe de Correos y fueron cruelmente asesinados en la carretera de Bigastro a Torrevieja.

Los hechos no quedaron del todo aclarados; pero parece ser que «el Cascarón», domiciliado en el «Pocico de Santiago» y vecino de don Francisco, fue el encargado de ejecutarlo con tres tiros en el pecho, utilizando para ello la pistola que le había confiscado días atrás.

Con Aurelio emplearon un disparo de escopeta a bocajarro y, según las declaraciones de los testigos que acudieron a recoger los cadáveres, «Pincelito» y «Cascarón», acompañados por el hijo de un arrendador despedido por Francisco Díe, permanecieron en el lugar de los hechos, posando orgullosos de su «hazaña» hasta que se llevaron los cuerpos.

Monumento en recuerdo de Francisco Díe, Cementerio de Bigastro. Ajomalba.

En mi opinión, este famoso «paseo» tuvo más connotaciones personales que políticas. Leyendo los testimonios de Ramón Pérez y Antonio Pujazón, anarquistas y miembros del Comité de Enlace, el primero citaba a Paco Díe como gran alcalde, y el segundo calificó su muerte de abominable asesinato y repugnante crimen que propició la disolución del Comité de Enlace y ensombreció la causa republicana en Orihuela.

Monumento en recuerdo de Francisco Díe, Cementerio de Bigastro. Ajomalba.

En el lugar en el que fueron asesinados levantaron dos monolitos en su recuerdo. Remodelada la carretera, permanecen en el cementerio de Bigastro.

Monumento en recuerdo de Aurelio Alonso. Cementerio de Bigastro. Ajomalba.

El mismo Pincelito fue autor de los dos tiros que destrozaron la imagen de su amada virgen; que fue quemada perdiéndose para siempre la valiosa corona.

Mejor suerte corrieron el resto de las joyas. Trasladadas discretamente en seis capazos por su sobrina,  con ayuda de otras dos mujeres, durmieron enterradas bajo un montón de estiércol en la cuadra de una casa situada en la carretera de Arneva. Acabada la guerra entregaron las alhajas al cura de Monserrate.

Archivo Loles Botella.

El 15 de octubre de 1940 se acordó titular «calle de Francisco Díe» al sector de la calle de Santiago donde tenía su residencia, en el número 40. El tramo comprendido entre la plaza del mismo y la calle del marqués de Arneva.

Transcribo literalmente el acuerdo municipal: 

«Con el fin de testimoniar el reconocimiento que Orihuela debía al libertador de España de las garras del marxismo, al iniciador del glorioso alzamiento y en el resto de los designados al elemento civil a Falange, a los tradicionalistas y a los militares que dieron sus vidas por Dios y por España».

Fotografía Ajomalba.

Antonio José Mazón Albarracín (Ajomalba).